Carta de Despedida de Lita Moyano a 3º Comercial

El 11 de Noviembre de 1985, Lita se despidió de su primer grupo de alumnos con esta carta. Hacé click en cada página para verla ampliada. ¡Gracias Gramajo por conservarla! - O leé el texto transcripto a continuación:

11 de Noviembre de 1985
A mi 3º Comercial.
Queridos Chicos:
Hubiese querido decir todas las palabras que escribiré en este trozo de papel, sin leerlas, pero no estoy segura de no emocionarme al hacerlo.
Descuidadamente llegó el día de despedirme de ustedes como mis alumnos, mis primeros alumnos y sinceramente es un día triste por ello.
Aún recuerdo sus caritas, aquel día que entré en sus vidas y que ustedes ocuparon un lugar muy importante en la mía, aún recuerdo mi miedo, ese de no saber qué decir.
Quiero decirles, que los quiero, sin compromisos, por ser así, tan simples, tan sinceros, por el cariño que brindan, por ser tan unidos.
Quiero agradecerles por dejarme comenzar con ustedes, por todo lo que aprendí de ustedes, por cada ratito que me brindaron, permitiéndome conocerlos, por confiar en mí en muchos momentos.
Y les pido perdón por mis errores, que sé he cometido, por haberles fallado a veces, por mis retos, pero quiero que sepan que cada día he tratado de darles lo mejor de mi, de enseñarles lo bueno y he intentado alejarlos de lo malo, de aquello que pueda dañarlos.
Quizás a veces he exagerado mis cuidados, pero siempre fue evitándoles el daño.
Quiero que guarden de mi todo lo positivo, todo aquello que pueda servirles para seguir una vidahonesta, donde siempre se ponga de manifiesto la bondad que yo conozco en ustedes. Y quiero que olviden aquello malo que vieron en mí.
Me he encariñado tanto y en tal forma con ustedes que no quisiera dejarlos nunca, que no quisiera verlos crecer, pero es tan difícil como imposible.
Quiero que sepan que nunca los olvidaré, porque he aprendido todo lo que pueda ayudarme a ser una buena profesora, con ustedes, sé que aún me falta para lograrlo, pero sé que he comenzado a vuestro lado.
No puedo decirles adiós, quiero decirles cada día hasta luego, quiero ofrecerles mi amistad incondicional, siempre y en cada momento, bueno o malo, de alegría o tristeza, y todo aquello en que me necesiten, pero no como profesora, sino como amiga.
Conserven su alegría, su unión envidiable, sigan así, sinceros, con ganas de vivir la vida espontánea y cuídense cada día.
Perdonen quienes yo he descuidado, a quienes yo no he llegado, pero recuerden que al igual que a aquellos con quienes más he compartido, los he querido y quiero.

Lita